Dios nos ha hecho para si mismo, y nuestros corazones estan inquietos hasta que encuentran su reposo en El.
Hay muchas cosas en mi vida que yo solo recibí cuando aprendí a descansar en Dios.
Parece ser una tarea fácil o sencilla, pero en la hora de la realidad, de poner en práctica, es difícil. Nuestra mente queda cargada de preocupaciones, no dormimos por el insomnio, no disfrutamos de nuestros días como hijos de Dios.
Por eso Pablo dijo “esforcémonos por entrar en el reposo de Dios” (Hebreos 4). Si bien sabemos que el texto se refiere a un descanso celestial, en la eternidad, Dios quiere que lo disfrutemos desde aquí.
En el primer libro de la biblia podemos ver que el propio Dios descanso al finalizar toda su obra.
Hay un modelo que la biblia nos apunta, que debemos seguir para recibir lo que Dios ya nos ha dado mediante Cristo Jesús. Es recibir el Reino de Dios como un niño.
Podemos ver que cuando Jesús habla sobre RECIBIR el reino de Dios, siempre usa como ejemplo los niños.
"Dios mío, yo no me creo más que nadie, ni miro a nadie con desprecio; no hago alardes de grandeza, ni pretendo hacer grandes maravillas, pues no podría llevarlas a cabo.
Más bien, me he calmado; me he tranquilizado como se tranquiliza un niño cuando su madre le da el pecho. ¡Estoy tranquilo como un niño después de haber tomado el pecho!" Salmos 131
Les aseguro que el que no reciba el reino de Dios como un niño, de ninguna manera entrará en él». Lucas 18:17
En aquel tiempo los discípulos vinieron a Jesús, diciendo: ¿Quién es el mayor en el reino de los cielos? 2Y llamando Jesús a un niño, lo puso en medio de ellos, 3y dijo: De cierto os digo, que, si no os volvéis y os hacéis como niños, no entraréis en el reino de los cielos. 4Así que, cualquiera que se humille como este niño, ése es el mayor en el reino de los cielos. Mateo 18:1-4
¿Qué significa eso? ¿Qué relación eso tiene con el descanso? Para entender mejor el contexto en que Jesús estaba hablando veamos las características de un niño:
1- Humildad
El niño está totalmente rendido a la voluntad del adulto.
Si un adulto le quiere gritar, le va a gritar, si quiere alzarlo así será, si quiere abrazar y besar lo va a hacer. Y lo más importante, el niño es totalmente moldeable. (Por ejemplo, la educación de un niño depende de sus Padres). Cuando nacemos de nuevo y nuestros ojos se abren, vemos a Dios como es, luz, amor, misericordia, poder, gracia y también un fuego que consume, la respuesta natural del hombre al saber y conocer la naturaleza tan impactante de Dios es humillarse así mismo, ante este Dios poderoso y soberano, así como un niño se humilla a sus padres porque reconoce a su autoridad.
2- Dependencia
Otro de las bendiciones o dones que Dios ha derramado sobre los niños, es que son dependientes casi en su totalidad de sus padres o tutores, los niños dependen de sus padres para que todas sus necesidades sean cubiertas. Un niño confía sin reflexionar, con un corazón abierto.
Debemos reconocer a Dios como un padre dispuesto a cubrir todas nuestras necesidades tanto físicas como espirituales.
¿Qué padre de vosotros, si su hijo le pide pan, le dará una piedra? ¿o si pescado, en lugar de pescado, le dará una serpiente? ¿O si le pide un huevo, le dará un escorpión? 13Pues si vosotros, siendo malos, sabéis dar buenas dádivas a vuestros hijos, ¿cuánto más vuestro Padre celestial dará el Espíritu Santo a los que se lo pidan? Lucas 11:12
3- Fe
Otra bendición que Dios ha derramado sobre los niños es que los ha hecho fuertes en la fe, sabemos que la fe viene de Dios y es Él quien ha decido dotar a los niños de una ¨Fe que mueve montañas".
Los padres lo saben bien, puedes llegar con tu hijo y prometerle que mañana lo llevarás a la luna y el lo va a creer. al niño no sabe cómo le vas a hacer, si siquiera se cuestiona si puedes o no, él sólo cree en tu palabra y tiene la certeza de que irá con su padre a la luna!
Sabemos que Sin fe es imposible agradar a Dios.
Pero qué pasa con los adultos, ¿cuándo Dios nos demanda fe? empezamos a dudar, empezamos a ver todas las imposibilidades y obstáculos, a diferencia del niño que fija sus ojos en una sola cosa, su padre.
4- Perdón
Los niños son grandemente agradecidos con el don de perdonar. Nosotros los adultos somos muy orgullosos. “de gracia recibisteis, dad de gracia.” Mateo 10:18
5- Amor
Por último, tenemos el don mas poderoso de todos, porque refleja el carácter de Cristo, este don es el amor.
Los niños aman sin condición, por mas que sus padres sean “mal padres” ellos simplemente los aman, ese es el amor que Dios ha derramado en los niños un amor incondicional.
Sin cumplir expectativas, sin esperar perfección, sin recibir regalos, ese es el amor incondicional de un niño. “ El amor es paciente, es bondadoso. El amor no es envidioso ni jactancioso ni orgulloso. No se comporta con rudeza, no es egoísta, no se enoja fácilmente, no guarda rencor. El amor no se deleita en la maldad, sino que se regocija con la verdad. Todo lo disculpa, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta.” 1 Corintios 13:4
Entonces podemos ver en los niños, el modelo ideal para los cristianos y como debemos acercarnos al trono de la gracia de Dios con confianza. De esta manera andaremos descansados en Dios, con un corazón humillado, necesitado, con un corazón limpio que ha perdonado todo, que tiene fe y que ama incondicionalmente.
Una mente que esta demasiada ocupada es anormal. La mente es normal cuando esta descansando, no en blanco, sino descansando. La mente no debe llenarse de razonamientos (incredulidades), preocupaciones, ansiedades, temores y cosas así. Debe estar calma y serena. Ese descanso nos trajo Jesús Cristo.
Leyendo el libro de éxodo, vemos que Dios provio el mana del cielo para el pueblo de Israel, era una provisión diaria, lo que sobraba de un día no les servía para el otro, pues se fregaba.
El señor también les instruyo sobre el día del reposo. En el séptimo día (shabat), el pueblo de Israel no podía salir a “recoger” el mana, debería estar descansando. Un día anterior al séptimo dia el pueblo era ordenado a guardar el mana para el dia del descanso. Entonces Dios hizo doble milagro: En el día del reposo, no se agusano el mana y no cayo mana del cielo como en los otros días.
Cuando estamos descansando, Dios hace doble milagros.
El ejercicio de “reposar” es una prueba de fe, el reposo no es una opción, es un mandato, un principio de Dios.
Amanda Borges
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